RELATO DEL ASCENSO AL VOLCÁN SAN MIGUEL/ CHAPARRASTIQUE - El Salvador | Jordi Maqueda

El Volcán de San Miguel, también conocido como Volcán Chaparrastique, está ubicado en el departamento de San Miguel y a 11 kilómetros de la ciudad del mismo nombre en El Salvador. Se levanta aislado de la cordillera de Chinameca. Tiene una altura de 2129 msnm, siendo el tercer volcán más alto del país.1​ Presenta un cráter central de unos 800 metros de diámetro y varios adventicios por los cuales ha expulsado lava quemada. Además, su cono es considerado como el mejor formado del país.

El edificio volcánico es asimétrico y constituye el único elemento significativo del relieve sobre una planicie de 100 metros de altitud media que lo rodea en sus laderas este, sur y oeste. En su flanco norte se interestratifica con el cono truncado del Volcán de Chinameca (también llamado Volcán El Pacayal) actualmente inactivo. En la parte más baja de las laderas de estos dos volcanes discurre la carretera que une la Panamericana con la Litoral a través de San Jorge. Sus laderas forman parte de las municipalidades de San Miguel, Quelepa, Moncagua, Chinameca, San Jorge, San Rafael Oriente y El Tránsito, todas del Departamento de San Miguel. 

Este volcán se considera entre los seis más activos de El Salvador. Se calculan al menos 26 erupciones en los últimos 304 años, la más notable la del año 1787. Desde la fundación de la ciudad de San Miguel en 1530, se cuentan ocho flujos de lava a través de las fisuras del cono volcánico. Las últimas actividades eruptivas se han producido en 1976, ​y la actividad sísmica relacionada al volcán disminuyó gradualmente al año 2006. ​Su última actividad reportada es con fecha 29 de diciembre de 2013, cuando expulsó una columna de humo y ceniza en modo de explosión, alcanzando esta los 5 km de altura, afectando los municipios de Santa Elena, San Jorge, Alegría, Berlín y San Vicente incluso llegando hasta la ciudad capital San Salvador a 140 kilómetros de distancia, El volcán Chaparrastique, presentó una erupción de gas y ceniza a las 4:44 de la tarde del día 12 de febrero de 2014, que tuvo una duración de 10 minutos. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó que la explosión arrojó ceniza y gases a una altura aproximada de 500 metros. -(Justo después de regresar yo a España entro en actividad en octubre de 2019)-. 

El día que ascendí al “Chaparrastique”, fue la mañana siguiente a mi llegada a El Salvador. Ni que decir cuál era mi estado físico, habiendo tenido más de 22 horas de viaje seguidas (incluyendo transbordo en Guatemala) y solo 4 de descanso tras llegar. Pero la instancia de mi guía dio resultado y ahí estaba yo, a las 8 a.m listo para envara el volcán más duro y difícil de El Salvador.

En la mañana del ascenso llegamos a una finca cafetalera muy grande entramos a la misma desayunamos y nos preparamos para iniciar el ascenso entre cafetales y por la vía directa, más dura que la turística. Me pareció curioso lo que vi pues era café de costa y de sombra tenían eucaliptos, en fin avanzamos por un camino de la finca y luego rompimos entre cafetales vegetación y troncos caídos, hasta salir a una parte más frondosa de bosque con bastante vegetación, un camino más difícil  si cabe. Más arriba topamos con tramos de selva tropical con un sendero poco claro pero que fuimos venciendo poco a poco. El calor se notaba, y la vía directa también al no dar ningún rodeo e ir selva a través, sorteando todo tipo de obstáculos por el camino. 

A medida que avanzamos había menos vegetación. Finalmente se acabó y después de tramos muy verticales empezamos a escalar hasta llegar a los pajonales. A medida que avanzamos se veía la cumbre, frente a mi iba Luis. Al salir de los pajonales entramos a la escoria volcánica, esta fue la parte más difícil del ascenso la pendiente brutal y las rocas y escoria estaban sueltas, subíamos dos metros y resbalamos otro atrás. Escuchamos crujir de piedras, y vimos como descendían a gran velocidad algunas del tamaño de una pelota de fútbol, arrastrando otras tantas más pequeñas,  una amenaza..  recomiendo llevar casco por si acaso, pues se trata de una vertical importante y no se ve venir, y no se oye por el fuerte viento en el cono pelado,  lo que cae de arriba. 

A partir de este momento nos pusimos con mayor atención y seguimos escalando con sustos momentáneos. Al salir de la escalada hubo necesidad de caminar en una arista desde donde se observaba el cráter. Después de alcanzar la cumbre nos tiramos en el suelo tras de las fotos de rigor. Muchas agencias ofrecen hacer cumbre en “el chapa...” bien. Primero las agencias no pueden subir pues está prohibido. Tomen guías locales y prepárense: esto es duro donde los haya, y los locales llevan a algunos turistas para reírse de ellos. es un reto, no por la altura sino por el esfuerzo necesario.... y tomen 7 u 8 horas no cinco,y recuerden... está prohibido.. Ustedes deciden. 

Recuerdo la subida al San miguel de una forma especial, posiblemente la más dura salvando un desnivel de 1700m en 9 horas y media. Eso fue lo que tardamos en atravesar los campos de cafetales, el bosque tropical, selva, pajonales y escoria volcánica, con una inclinación final acojonante, y ese olor particular a que me encanta. Tres horas y media llevó luego regresar "corriendo" ladera abajo entre resbalones y confusión tratando de encontrar el camino de regreso ya anochecido. Por último dejo aquí un apunte interesante como poco, en relación a los gases volcánicos.

Desgasificación San Miguel

amplio este  este post en relación a una noticia de la que me hacía eco. Por lo visto, 20 días después de subir volcán de San Miguel, y ya de regreso en España, éste amanecía entre fuertes explosiones y desgasificaciones, arrojando escombros y escoria volcánica. El volcán ya era prohibido entonces por las autoridades, y aún así bajo nuestra propia responsabilidad subimos. Y el "Chapa" ("Chaparrastique") ---que es como le llaman allá--- se dejó escalar. Hoy sería imposible, y a saber cuándo se podrá. Por eso, "si tienes una oportunidad en la vida de hacer algo, y la reconoces... no la desperdicies, quizá no se repita".